miércoles, 6 de marzo de 2013

El Instante




mientras el tiempo cierra su abanico
y no hay nada detrás de sus imágenes
el instante se abisma y sobrenada
rodeado de muerte, amenazado
por la noche y su lúgubre bostezo,...
Piedra de Sol.-  Octavio Paz


Lo que es un instante,
un simple transcurrir del tiempo
en una forma imperceptible,
lo que es una duración 
menor a un segundo,
puede ser el intervalo 
mas grande de la vida,
el sobresalto del ser
al percatarse 
que  por esa rendija 
de momentos que se asoman 
a  una ventana hacia otros mundos,
atisban los misterios de aquello 
que nunca se conoce
y en ese lapso de tiempo,
como un gran rollo de papel 
blanco, trasparente,
se relacionan las historias
que le dan eco a las vidas 
o a las cosas que se observan,
las sensaciones físicas, 
los deseos que dominan 
el quehacer  sin forma 
de los hombres;
abstracciones que desvían 
el significado de lo incierto,
vislumbrado en ese instante 
como un resplandor 
que ciega las ideas.

Y entonces comienza 
la labor del artesano,
el oficio sin par del escribiente
en ese intenso proceso 
de apretar las energías,
macerar intensamente al verbo 
con el martillo de los símbolos
y alargar la membrana 
de signos imprecisos
hacia un cortejo bruñido 
de espejos infinitos
que retienen el instante,
ese punto cronométrico
donde la profundidad del negro
atrapa el colorido resplandor 
de los misterios.

En un mirar de luces 
y de sombras,
las palabras son gestadas
por un sinfín de asombros 
incoherentes,balbuceos 
que inventan  la metáfora
en el buche del pájaro invisible.

En una sinfonía de gritos mudos,
esperas musicales de silencio,
el espejo se transforma 
en graznidos encendidos
y vomita la palabra diferente
mas allá de relatos congelados
o presentes enterrados,
mas allá del rescate del futuro
con las hojas registradas 
de un manuscrito milenario.

El instante es una razón de ser
de todo aquello 
que nunca comprendemos
y por lo mismo 
bautizamos los eventos
que transcurren 
dentro de los ojos,
con el miedo,
la inconciencia,
o la ignorancia,
cuando en momentos 
de oraciones mágicas,
el silencio se acurruca 
en la palma de la mano.

Las formas que delinean el espíritu
se apoderan de su esencia
con símbolos concretos 
y fugaces
para romper el equilibrio 
de la vida suspendida
en el largo segundo 
anticipado por la muerte.

2 comentarios:

  1. Que hermosa percepción del instante, el segundo, que antecede a lo que llamamos eternidad. Este preámbulo al que podríamos considerar "el pasar de la película" ante lo inminente del momento que llegará... inevitable, y que algunos lo hemos experimentado y sobrevivido? Muy bello, Moyeto. Me tocó el corazón y la memoria.

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