Entre las
venas de esta tierra roja
con detalles
verdes
El blanco se
ha esfumado
en diferentes
versiones de país
Es cierto
que una parte de nación
me
corresponde
La familia,
unos cuantos vecinos,
toda la
gente que miro
Y se cruza
en mi camino sin destinos
a un lado
del mar
para mojar
mis recuerdos
con la brisa
Un poema
corto en unas cuantas líneas
encierra el
blanco
como el
concepto de patria
que JoséEmilio Pacheco nos regala
Pero en este
país de imaginarios
y
crueles verdades trashumantes
todos los
dueños que no dejan de serlo
Por más de
cuatrocientos años
descuartizan
la historia
y la cuecen
para el banquete de sus celebraciones
de la misma
forma que el mas desalmado
criminal
deshace cuerpos
también trituran el espíritu
y esa
voluntad de despojarnos las cadenas
de la
televisión y una falsa Escuela.
Arriba de
nosotros
como el
hermano mayor de Orwell
nos trituran
la consciencia
en un
conjunto de abstracciones y metáforas
y un sinfín de
sentimientos encontrados
alrededor de
mi giran
como si
fueran espejos
para
desvanecer mi rostro
entre sus
rostros
mis
pensamientos son ahogados
y se
reflejan en el otro transformado
en uno solo
y es cuando
entiendo el verso
” todos los
rostros son un solo rostro”
o ese otro que
anota Paz sobre los otros:
Y como un
nuevo laberinto
donde las
soledades se acompañan
Quien soy
yo me pregunto
“¿Quienes somos
los que somos
si no es lo
que somos
que sin ser
no somos nada?”
